Edificio de exposiciones de BMW

Este es un gran edificio diseñado por el estudio Coop Himmelb(L)au, concebido con una imagen y una silueta futuristas, recubierto de placas de acero y de cristal. El edificio en su totalidad representa un templo moderno construido para la “adoración” del diseño de la máquina.

Debido a su emplazamiento y su conformación como un “nuevo templo”, en BMW Welt aparece expresado el tema procesional: un palacio de estructura de cristal semitransparente, acero ondulado y un techo que finaliza en una doble torsión en forma de cono, donde el usuario moderno casual, como esos peregrinos ancestrales, busca la expresión última del saber técnico de la vanguardia maquínica, sublimada en diseño y caballos de fuerza. El interior posee una composición de escaleras monumentales, puentes curvos y balcones que se sostienen en el aire. Además, en ese mismo espacio, encontramos amplios sectores de exhibición de todos los modelos actuales de vehículos de BMW, desde sus motocicletas, hasta el F1.07 y el prototipo utilizado en Campeonato Mundial de Fórmula 1. El doble cono del edificio es una de las construcciones más audaces realizadas en la actualidad. Esta obra maestra de vidrio y acero sostiene una ‘nube triangular’ de acero y paneles solares que es el techo de la construcción que sobrevuela por encima de toda la BMW Welt. Con la iluminación adecuada, parece una asimétrica clepsidra de 28 metros de altura, un diámetro máximo de 45 metros y 720 toneladas de peso. El cono inferior está cubierto con vidrio templado de 8 mm de grosor; el superior también, pero además está reforzado por vidrio laminado de seguridad. Los interiores siguen las mismas directrices. Todos los espacios tienen protecciones de paneles de acero inoxidable perforado que frenan a los rayos UV, siendo además un edificio sustentable en su totalidad, respetuoso del medioambiente.

Garage Desaix de París

Obra del arquitecto M. Gouillet, esta obra realizada por Saint-Gobain en los primeros años del siglo XX surgió en un contexto en donde el desarrollo y el uso del automóvil requería de lugares de guardado.

Implantado en la trama existente de la ciudad, como una respuesta clara que albergara al emblema de la vida moderna, fue diseñado con materiales que estaban siendo utilizados por el Movimiento Moderno (hierro, hormigón y ladrillos de vidrio). Estos elementos de nueva tecnología son utilizados en esa misma época por otros arquitectos, como en la casa de cristal de Pierre Chareau y en varios diseños de Le Corbusier. En el proyecto se incorpora la rampa para el acceso al mismo y su estructura a la vista (vigas metálicas, vigas y columnas de hormigón) y una piel casi en su totalidad de ladrillos de vidrios traslucidos y resistentes, proporcionando una imagen teatral, una gran bambalina, una escenografía, donde el automóvil pasa a ser el actor principal y toda la obra transcurre entre su andar, su movimiento y su presencia omnipotente.